Una mariposa en la flor
Una canción entre dos,
un suspiro perdido, tu
voz que regresa por mi.
Un camino empinado,
hay aroma de almendros,
aquí y allá, van los gatos
en su juego de amor.
La fría luz de la farolas
apenas si dejan ver las
piedras del sendero, me
guio en el sabor de tu voz
En la cumbre de la colina
puedo otear, allí a tiro de
piedra el rumor del mar,
ronco gemido del amor.
Tu, con tu espuma y tu sal,
ondeando en las olas, en su
ir y venir, no te podré asir,
eres mi amor inmaterial.