Mi edad no existe, sí existe mi yo,
un yo que siempre hace sentirme el YO,
no el yo circunstancial, que yo soy YO
-dixit Ortega: "circunstancia y yo".
Por años que pasan mi yo es medido
según calendario, en edades hecho.
Creación del YO, copulando el lecho,
llegaría a ser yo, habiendo nacido.
Que yo existo: me toco, lloro, río,
corro, hago el amor (si puedo), " me corro",
me visualizo, paseo a mi perro.
Mi edad está en el yo, quien envejece.
Pero no estará en el YO pensador,
padeciendo el yo, siendo el YO el que vive.
(Salvador)