De amores negados,
de risas marchitadas
olvidadas por el tiempo,
y de pasiones soñadas,
tengo el corazón henchido
hasta el punto que estalla.
De miradas huidizas
de quien te da la espalda,
de lágrimas de cocodrilo,
y de carpetas cerradas
tengo la vida repleta;
tiempo es ya de vaciarla…