La vida sigue construyendo babilonias diversas
Caminantes, vecinos,
distantes, también amigos
apostando en el mismo juego…
La vida sigue construyendo
babilonias dispersas, ordenadas, visibles
como sombras de los álamos
enfriando los caminos
en tardes de verano
por senderos de tierra
que nunca llegan,
solo caminan
esos caminos
bordeando sus orillas
con formación de columnas
yuxtapuestas y mudas..
- Inmutables sombras
viendo pasar el tiempo
pintando el suelo con choapinos amarillos
y alfombras mustias
que se mantendrán durmiendo
sembradas…
Hasta que llegue
la brisa con sus risas de juegos
y rondas de hojas sueltas
que le darán vida volando de nuevo
y cambiando de tumba y de colores
hasta que finalmente mueran
convertidas en tierra.