Vamos a hacer de la mierda
literatura.
Mierda es encontrarse lejos
de su cintura.
O verse en un país donde
no brilla el sol.
Que en el metro te insulten por
ser español.
Mierda es despertar sabiendo
que estaré frío,
que entraré otro día más en
el desvarío
de recorrer calles siendo
un solitario
aun sin ir solo, sino más
bien lo contrario.
Mierda es irse a descansar con
los pies de escarcha.
Soñar que al día siguiente
me pongo en marcha
y parto en un barco rumbo a
lo conocido
mientras con pena marinera
de Hamburgo me despido.