Paloma P.P.

Mi amigo el fantasma.

 

Tengo un amigo fantasma
que un día le conocí
El no verlo me entusiasma...
Le escuché cuando le oí.

El apareció bailando,
levantó mis sabanillas,
mientras estaba soñando
con terribles pesadillas.

Se acercó a mí y me besaba,
manifestó su cariño,
desde entonces ya jugaba
con él como el mejor niño.

Volaban muchos juguetes,
me calzaba y me vestía,
me cortaba los filetes,
servía comida fría.

Me leía lindos cuentos,
me arropaba con la manta,
se escapaba con los vientos,
verle volando me espanta.

Venía a verme enseguida,
limpiaba mi habitación,
charlamos sobre la vida
y me provoca ilusión.