Dijo una negra amorosa
soy igual a la rosa
con pétalos y espinas
Si hay alguno que se anima
con mi juego encantador,
que venga don Amador
para ver como se empina
no es gallo que le lastima
en una conciencia fina.
Me decía don Ruperto
que para el amor soy experto,
del dormitorio a la cocina,
a esta morena fina
de encantadores ojos
para mí son los abrojos
de la senda en que camina,
pero ya verá la indigna
cuando la tenga a la mano
sabrá que este ser humano
a su senda la encamina.
Y aunque llame a Teodoro
que dice es un tesoro
mirando al cielo nublado
quedará andando de lado
después de sentir mi amor
porque ya será del folklor
la juerga que danzaremos
y aunque me diga oremos
empeñoso será mi amor
por conseguirme esa flor.
En el jardín del edén
mira la cosa bién
que estamos muy empeñosos
y nos haremos famosos.
La picazón es tributo
en el amor de los brutos
solo con la paciencia
se ha de repartir la herencia.
Que entre la niña se aleje
es preferible que deje
un recuerdo muy estimado
que con un pequeño lavado
el problema desaparece.
Carlitos ya lo contaba
y me canté de la risa
esa niña petisa
que embruja al mas experto.
Así es la cosa Alberto
esa pasión que devora
ella muy bién la cosa dora
para engatuzar a Carlitos
que anda pegando gritos
en la mañana y a cualquier hora.
Un regimiento la adora
por sus curvas imponentes
paseándose entre clientes.
con su suave contoneo
le indica así me meneo
y aunque seas un brujo
mira bien como te estrujo
pedazo de sol caliente
que no seré exigente
a rascarte por si te miente.
Era la historia habilidosa
del mas agudo pequeño
si parecía ese sueño,
pero diciendo verdad
no era su humanidad
de una mujer piadosa,
Masculino era la cosa
que en forma tan mentirosa
engañaba a los clientes
al vertirse como rosa