Si hablas con amor y sientes
festejar la Navidad,
nunca te olvides su esencia
busca a Jesús al orar.
Y no olvides esa cruz
que al hombre crucificó;
al niño que lo dio todo
y por amor se entregó;
en ofrenda al Padre amado
por amor la vida dio,
para el perdón del pecado
del hombre en su sinrazón.
No hay regalo mas preciado
para nuestra Navidad,
que abrazar al niño amado
como uno, en hermandad;
mas allá de tus creencias
mas allá de tu oquedad
abraza al hombre olvidado
a tu hermano en orfandad.
Porque en el habita el niño
que al mundo vino a salvar
con el propio sacrificio
del amor su mismo obrar.
No te inquieten los regalos
ni ese árbol decorar,
prevalece en la coherencia
entre el decir y el actuar;
si hablas de amor y de paz
enaltece tu legado,
con un amor entrañable
en este día ensalzado.
Siempre hay un niño en la calle
un justo crucificado
en la Paz que nunca llega
por actitudes infames.
Bendice la Navidad respetando al respetarte;
mas allá de tus creencias ama, ser padre y ser madre
para el hijo en este mundo, con amor que no te falte.
¡un día, todos los días, la Navidad te acompañe!.
Autora. Alicia Almeida *Diluz
Diciembre 2016