No sé si es razonable o no,
pero después de un fracaso amoroso,
soñé durante una noche
una historia de amor
con mi subconsciente confuso.
Estaba contemplando un paisaje precioso,
sentada sobre la pradera,
mi amor se convierte en una vaca,
se acerca a mi lado,
me observa con una mirada tierna de amor,
me lame y me besa.
Estaba observando las flores de un almendro,
un colibrí que posa sobre sus ramas,
me canta una canción de amor,
“Corazón mío, te amo”.
El pájaro voló y se posó en mi hombro,
me ronroneaba y acariciaba,
y no paraba de cantarme
y manifestarme su amor.
Me bañé en la laguna del campo,
su agua helada me enfrió mucho el cuerpo,
nadaba sin parar atravesándola de un extremo a otro.
Un lindo pez me contemplaba,
¿Mi amor transformado en pez?,
me pregunté a mi misma.
El pez nadó y atravesó mi cabeza, mi cuerpo,
mis senos, nalgas y piernas
girando con sumo arte me acariciaba,
al final se me acercó a mi cara
y me besó en los labios.
Me desperté sobresaltada al amanecer,
Y leí en el aire las palabras AMOR, AMOR, AMOR,
escritas con letras de humo
y fascinada de la situación,
me pregunté a mi misma:
¿no estaré delirando de amor?