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Nadie es infalible
ante el inminente fracaso,
hay que despertarse con ayuda de Dios
y emprender el camino con fuertes pasos.
Nadie es infalible,
si somos seres perfectibles,
que podemos alcanzar la perfección,
con el amor de un Padre Eterno,
que se deposita en nuestro corazòn.
Siempre habita la luz en la oscuridad,
no dudes nunca,
abres tus ojos a la realidad,
y busca a Dios como tu única verdad.
La culpabilidad nos quiere atacar,
nos quiere confundir,
es bueno reconocer los errores,
y consolidar nuestra capacidad de amar.
No condenarse por las faltas personales,
ni pensar que somos los peores,
el amor de Dios desciende sobre tu espìritu,
y te hacer sentir como uno de los mejores.
La vida es como una escuela,
en forma diaria aprendemos,
siempre hay que cargar alguna secuela,
pero con el pensamiento positivo,
en la adversidad siempre vencemos.
Nadie es infalible,
la compañía de Dios nos da sentido,
por más que haya miles derrotas,
su misericordia es fiel y nada está perdido.
Nadie es infalible
ante el inminente fracaso,
hay que despertarse con ayuda de Dios
y emprender el camino con fuertes pasos.