¡Qué hermosa es mi Habana!
¡Qué bella es la música que acaricia suave y dulcemente mi alma!
Silenciosa, eterna y esperanzada, así es mi Habana.
¡Qué cercana te siento en este mar de mis sueños!
Mi mar, mi paz, mi libertad.
¡Oh mi Habana!
¡Cuánta nostalgia embriaga mi alma de poetisa esperanzada!