LÁGRIMAS.
Aventúrense lágrimas del cielo,
las más puras del muerdo entero.
Las veo bajar muy presurosas,
Como aves sin alas,
y como hojas secas.
Quiero verlas descansar
sobre el cristalino lecho del mar,
donde una se vuelve multitud,
donde la multitud se ve como una,
todo es homogéneo, es lindo contemplar.
Las veo bajar con actitud,
decididas a posarse en la magnitud
de la divina tierra y fertilizar…
su manto verde y terroso,
donde los elementos reposan,
esperando el néctar libidinoso,
donde la flora y la vida se fusionarán,
en un abrazo eterno y final…
De Alicia V.