El tiempo fresco se mezcla entre las extensiones del pie de monte andino
avivando mi mente cuando mis ojos repasan su azulado firmamento,
entre neblinas que cubren las lomas de aquel cerro lejano que me impulsan a ,
expandir mis pensamientos a la par de aquellas planificaciones alegres por
doquiera en que te encuentres mujer de cabellos rojos y sonrisa alegre...
Se acerca el efímero y silencioso mes de enero muy cercano al radiante sol
amarillo que me embelese con sus atardecer triste muy pendiente de,
aquellos recuerdos gratos de un ayer muy lejanos en donde tus suaves manos
palmearon mis hombros entre un saludo alegre y un beso dócil esperando ,
tus labios muy cerca a mis labios deseosos de sentirlos en pasiones tiernas…
Cierro mis ojos y apareces entre aquellas conversaciones amenas
compartiendo aquel café dulce entregado por tus suaves manos a,
mis manos ha llegado sin remordimiento alguno para solo saborear el aroma
que nos une con el amor del alma y nuestros corazones rojos,
muy serenos al ritmo de las suaves notas del piano del amor…
Tristeza no siento porque tus recuerdos acechan mis sueños nocturnos
entre pesadillas tiernas que aceleran mi pasión y ganas de tenerte en,
un abrir y cerrar de ojos lujuriosos tiernos añorando siempre tus besos
especiales y largos en las sábanas tensas que cubren las horas y,
aquel toque especial convertido en un mundo mágico entre sueños lindos…
Recuerdo y saludos que abruman mi mente para reavivar alegrías tiernas
compuestas por tus bellos instinto sutiles de querer otra vez besar mis labios ,
para solo dejarme en opciones verosímiles de aquellos sueños
entre tus atardecer claros y radiante muy genialmente de solo decorar la sala ,
con manojos de esbeltas espigas de la caña brava…
RIVAS JOSE
Barinas – Venezuela.