LUIS ADONAY VENEGAS LEYTON

En aventura de ciudad grande...

 

En aventura de ciudad grande...

 

 Fue una noche larga aquella

que nos separó y   juntó

nuestros caminos, ella mi flor

en la Ciudad de los Confines

y yo lejos en aventura de ciudad grande

intentando adaptarme para sobrevivir

con éxito en medio de tanta gente

que camina y camina silenciosa

encerradas en sus jaulas como

avecillas presas...

que solo pueden cantar sus penas

y dolores de encierros

por no poder volar

sus naturales libertades.

   

Caminantes sin camino

llegando de noche, caminando a tientas

¿qué es lo que esperas?...

 

Como aldeano de cerro y montaña

de río y siembra cultivé mi semilla

y reconocí mi orilla y luché por ella

enfrentando realidades de origen

muy distintas…

 

Caminé y caminé cuadras y cuadras

de cemento duro sin sentirme ajeno

por venir de donde venía

disputé, mi lugar

con el que quisiera disputármelo,

gané y perdí,

infinitas veces me rehice…

 

Orgullosos de ser hijo del campo

de la lluvia y de la gris arcilla,

de mi Escuela N° 44 de Hombres de Purén mi pueblo

y del blanco Liceo de Hombres de Angol,

la Ciudad de los Confines

que en un amanecer de marzo

me adoptó y vio llorar mis soledades

lejos del nido…

Cuando aún era muy chico

aunque dispuesto a enfrentar caminos

distintos,  lejos del nido

 y de mis viejos…

Después de seis años me vio partir

con la frente en alto y dispuesto

a encontrar  nuevos caminos.