La tarde me conecta con la armonía.
Una emoción se libera en una canción.
Aquel que murió por dentro nace,
aquel que te amó te piensa.
¿Por qué te escondiste bajo tierra?
Mi corazón fue el refugio de tus ojos
y yo soñaba con ellos el manantial de la vida.
Pero te fuiste tan así:
tan sigilosa,
tan oculta;
sin el término de un verso,
dejándome un sinsabor.