Lo dije en otro Poema necesito
Vestirme de la Humildad más absoluta
para márcharme de Ermitaño a Vivir en
una Cueva
Que tenga para comer nada más que
Pan y Agua también necesito varios
Cuadernos en blanco una Pluma un
Tintero una Manta y un Farol para poder
escribir por las noches cuando se ha retirado
a dormir el Sol,
Voy a ser un poco más egoísta pediré 2 galones
de Vino tinto pues me alegrará las noches cuando tenga muy bajo el Espíritu...
Quiero saber realmente qué hay de Verdad en la morada de mi Enfermo Corazón y aunque creo en la santa sagrada palabra albergo la Esperanza de que conseguiré encontrarme con mi Alma
En una Noche de Luna cerrada cara a cara y sin atajos por los caminos de la Verdad encontraré
la verdadera Humildad que procuro sin Cesar...
Pero para ello necesito llenarme también de la más Pura sinceridad, pues nadie quiere
reconocer que nacemos con Miserias Humanas que son muy difíciles de Desprender...
Y me costará una Gran Voluntad para desintoxicarme de ellas aún que sé que
en mi Dios encontraré Paz y alivio suficiente
para enterrar lo que queda de mi Ego
Dolores me costará también librarme de mis Pecados...pero hallaré la grandeza del perdón para beber de su Fuente que me guiará hacia la Luz que me hará crecer Espiritualmente día a día,
Pero para Crecer hace falta sufrir y humillar al Ego y la desidia que son primos hermanos de la Envidia...... sicarios asesinos del Corazón que te hacen dudar si has hallado el cauce del Río que atraviesa la Maldad, que viene con nosotros
Pues no soy ningún Santo por lo contrario soy un Pecador ahora sin Pecado que busca Ayuda para huir definitivamente del Infierno de la Amargura.
Me pondré mi segunda Túnica de Humildad ...
en todo este Proceso de encontrarme con mi Yo pagaré con creces despojarme de todas las
manchas de mi Alma y me sentiré Libre en esta Catedral donde hallaré la verdadera Espiritualidad en mi pequeña Cueva y con mi amigo el Silencio que me ha ayudará encontrarme conmigo mismo ......:.
Rezaré a mi manera a mi Dios...para darle las gracias de haberme por fin, encontrado conmigo Mismo
Amén .
Mael.