Mordí la sombra de tu recuerdo,
le encajé las uñas a la nostalgia
abracé el vaho del último suspiro
metí en un hatillo tu memoria..
Y salí a perderme en las penumbras
llevando tu recuerdo encadenado,
me interné en el bosque del olvido
y le dí veinte vueltas,
intentando extraviar reminiscencias
de un amor que se perdió en la nada..
Pero es terco ese amor de utilería
y se aferra a mi, como un naufrago..
!El maldito tiene instinto de felino!
y al volver a casa... !me estaba esperando!..
Ya no sé que hacer cuando sin querer
te pienso, renaces en mí con tanta fuerza
que no puedo soportar tu lejanía
aunque eso, sea todo lo que tengo..
Y los días se hacen lentos y nublosos
cuando a solas me asedia la nostalgia
tu recuerdo se agiganta y me consume
hostigando la cordura que se acaba...
y revive la locura como ultimo recurso
pues mi mente ya no puede soportarlo,
inventando en sus novelas un amor puro
que es a prueba de olvidos y de engaños..
y renace entre sus sueños esa historia
que parece final de cuento de Hadas,
!y fueron felices para siempre!,
aunque sea solo una quimera
pues la verdad es que aun me dueles
y te tengo metida !hasta el alma!...
UN POETA LÍRICO
Agil 04/04/2015