No ofrezco resistencia,
no hay manera…
No puedo no amarte.
Tu ausencia,
tan llena de fantasmas
de espacios inconclusos
y paredes falsas,
de miedos anudados.
Tu ausencia me llama,
me inquiere,
Tu ausencia me inquieta,
con su voz callada,
con su voz de sombra,
con su voz de ecos
de recuerdos ajenos.
Le hablo entonces,
a tu presencia ausente,
muda y silenciosa
como mi voz…
y ella me responde
justo tras los ojos,
mis ojos.
Ella me responde
y no puedo oírla,
no quiero.
No puedo no amarte.
No puedo.
No hay manera
Mi amor ya me venció.