Desde un grito de dolor ahogado
Escribo estos versos esta tarde
Donde el sol se pinta de coral
Y el aire sabe a pino
He visto el rostro doliente
Del caminante que no encuentra posada
Y el llanto desolador de un migrante
Que emprende el vuelo a otro cielo
Conozco la angustia de un refugiado
Que intenta sobrevivir entre balas y bombas
Y el hambre de quien la tierra no le rinde
Y su cosecha se ha secado para siempre
He tocado de cerca la peor de las pobrezas:
La marginación en silencio
En soledad la marcha que es eterna
Las voces silenciadas de los opositores
Pero hoy quiero escribir mi propio dolor
Un dolor que se asfixia en el pecho
La sensación punzante de la traición
Hoy, como desde siempre, lloro mi pena en soledad
Mi historia es el chillido que provocan las puertas al cerrarse
El silbido del búho nocturno que canta su agonía
Con breves espacios de suspiros se dibuja
Un sino que ha sido desterrado
Ni aquí ni allá, no soy de ningún sitio
El sosiego no esta dicho para mí
Sólo la inquietante danza de un águila que ansía un verano
Soy una rama seca que se la lleva el viento, sólo viento soy
Qué más quisiera que encontrar mi melodía
Que mis pies descalzos dancen en el encuentro de las notas
Tocar el arpa del amor
Y apenas rozar la sonrisa que emana del sonido
Un día… sí, me consuelo con un día
La gloria se vestirá de gala una noche
Y en mi ventana observaremos el devenir de las horas
Un día como hoy, contaré el dolor que siento
Como el verde de la primavera me sentí
Luego vino el otoño y cerca está el invierno
Las hojas se empiezan a caer
Y hacen un estruendo al pisarlas
¿Será acaso que esa es mi nueva sinfonía?
Una composición perfecta de ruidos sonoros
Un ensordecedor paso del viento que revuelve
¿será que soy yo el viento?
Viento de la tarde seré
Y conmigo llevaré lo rancio
Sólo un vaho de algodón quedará
Cuando mi vuelo emprenda en el ocaso
Seré el viento que sopla
De día y de noche sopla
En verano y en otoño sola
Voy a donde el viento vaya