Creo que en otra vida nos amamos
pero el destino nos hizo separar
tal vez tuvimos un amor truncado
y no pudimos dejarnos de amar.
No sé, si es que hemos reencarnado
al no lograr ese ciclo terminar
pero yo percibía en mi, algo extraño
que no podía mi alma decifrár.
Es que ya, presentía tu existencia
sin poderte en esta vida conocer
pero tu rostro, en mi mente aparecía
y en mis sueños te podía siempre ver.
No supe nunca cual era tu nombre
ni imaginaba te podía encontrar
pero siempre, te llevaba en mi mente
y necesitaba el poderte hallar.
Cuando al fin, logramos encontrarnos
fue tan solo un cruce de miradas
sin hablar, nos sentimos atraídos
y fue un decir te quiero sin palabras.
Creo, fuimos felices en otra vida
porque al mirarte, sentí gran emoción
pero a la vez sentí me dolía el alma
al no poder entregarte el corazón.
Aunque ahora, este amor es imposible
el destino desidió hacernos juntar
y aunque deseo, no puedo quererte
se que tú tampoco, me puedes amar.
Solo nos queda amarnos en silencio
sin la esperanza de recomenzar
tal vez no se repita este episodio
porque no nos volveremos a encontrár.
Aunque ya el otoño está en mi vida,
en mí brotó el amor como una flor
su perfume embriagó toda mi alma
y aunque fugáz, doy gracias al amor.