FE, O FANATISMO
En verdad mueve montañas
esa fe en la que creemos,
y que a veces padecemos
viendo como nos engañan,
esos que la misma amañan
para sus ideas imponernos,
a base de mantenernos
atentos a sus patrañas,
que afílan como guadañas
con la libertad que perdemos
y un terror en el cual te hayas.
Hay hoy una religión
que sigue ancláda en el pasado,
pues todo para ella es pecado
dando como explicación;
que un profeta es la razón
y todo al mismo está ligado,
aunque este ya desfasádo
el tiempo y la explicación,
del porque es hoy obligado
adorar una sinrazón.
Por mucho que se empecínen
los que al fanatismo adoran,
no pasaran de espécimen
en el lugar donde moran,
y aunque por allí caminen
entre quienes sus acciones dóran,
las lágrimas de los que lloran
harán sus impunidádes terminen,
llevándoles a donde moran
los demonios, y así alucinen.
Joanmoypra