No sabría si la lluvia de esta tarde
es más real en la calle que en mi alma.
No sabría por que se mezcla tanto
la nostalgia de tus ojos y esta calma.
No sabría si este gris me invade o brota
como un reclamo cruel de tanta ausencia,
desde lo más profundo de mi vida rota,
amasando lluvia y llanto, amor y ausencia.
Rosario, 13 de abril de 2005