"El hombre no es la suma de lo que tiene, sino la totalidad de lo que aún no tiene, de lo que podría ser" Jean-Paul Sartre
Me gusta el color de tu piel
porque el silencio envina el latido del ocaso,
cincelando la quincalla de vuestros ojos
con el misterio de un etéreo universo.
Sonríe y alumbra la ósmosis de los elipsis
cuando con el mar en la oscuridad son uno
perdiendo las dimensiones entre el cielo y la heredad,
y así, olvidar las cadenas empalmadas de diferencias
Hijos que de la tierra el color heredaron,
con su brío y lozana, con su beligerancia y sujeción,
donde el tormento hace sombra a una dama vestida de historia
quien con su manto de olvido seca su llanto.
Liguemos corazas como cacao con leche,
añejando con la luna su boato sobre la noche.
Clavel Rojo
Alejandra P. Rodríguez Espinosa. Todos los derechos reservados.