No merecías las intranquilizantes noches que pase derramando mis versos sobre estas lineas que parecen caminos sin rastro, ni el sentimiento que me abrazaba como ropa el corazón de almíbar que hoy es escurridizo entre mis tenues manos de espada no merecías esas nubes esas comparaciones absurdas con las que finguias enamorarte no se como explicar el viento que me abriga en soledades soy un mar abandonado hasta por las olas un árbol tan solo que ni la sombra lo acompaña de verdad estoy solo dentro de mi nadie quiere vivir todas se mudan mujer tan mía eras en mis sueños yo vivi hasta la última vez que supe de ti ahora tu ausencia me pesa mas que mis pecados y mis pecados son no dejarme amar como lo pide Dios hoy decidí engañar a mi corazón pues partiré a buscarte donde menos te encontraria te llamare a un numero desconocido te imaginare en otros brazos te olvidare sin olvidarme que te amo