Quédate conmigo
No te vayas,
quédate conmigo,
te necesito tanto…
¿O es que tú
no me necesitas?
Pensé que las promesas
de amor que nos hicimos,
habríamos de cumplirlas…
Los enamorados
siempre nos prometemos
ESE GRAN AMOR ETERNO.
Pero son solo promesas,
que con el tiempo,
no cumplimos.
EL AMOR NUNCA MUERE,
pero decae, cambia,
no llega lograr
a cumplirse.
Así es la vida,
así es el amor.
No quiero pecar de egoísta,
pero quédate conmigo.
Poseo muchas cosas materiales,
pero si te pierdo a ti,
ellas nada valdrían…
No exijo tu amor,
tampoco que me ames…
como antes…
Te estoy pidiendo
que te quedes conmigo.
No quiero tu piedad.
Quisiera que tu alma,
vuelva a unirse
a la mía.
Que nuestras almas
se unan,
y se conviertan,
como antes,
en una sola.
Te estoy pidiendo demasiado,
¿verdad?
Analiza nuestro pasado.
Recuerda los instantes
de amor compartidos.
Vibrábamos de placer…
Éramos dos cuerpos unidos,
transformado en uno solo.
Momentos inolvidables
de placer y unión de sentimientos.
Hoy solamente es
un buen recuerdo.
Llueve torrencialmente,
amo la lluvia,
y al mismo tiempo
la detesto…
¡Cuántos habrá
que por ella inundados están!
¿Recuerdas cuando decíamos:
“¡ qué hermoso
hacer el amor,
escuchando el caer de la lluvia!”?
La lluvia existe,
pero tus sentimientos
han cambiado.
Quédate conmigo,
no te vayas…
Derechos reservados de autor - Hugo Emilio Ocanto - 08/12/2014)