Aunque tenga un corazón,
yo no nací para el amor,
yo soy fruto de la perdición,
me pregunto por qué vivo señor,
quiero matarme como José Asunción,
pero no puedo: no tengo el valor,
el desamor y el dolor es mi maldición,
dicen que el dolor es desgarrador,
la ilusión ahora es desilusión,
a veces me afecta lo exterior,
la soledad y el silencio es mi consolación,
en el cuerpo siento un ardor,
mis pulmones le faltan la respiración,
me hace daño lo que siento en mi interior,
aunque tenga corazón,
yo no nací para el amor.