Crueles Vampiresas somos
de colmillos afilados
en busca de sangre vamos
y de hombres que enamorar
De caza en la noche fría
con capa color frambuesa
rubia y sedosa melena
con los ojos color de mar
Nuestra mirada embelesa
a cualquiera que se acerque
pues los hombres no aprenden
que nunca somos de fiar
Nuestra lengua viperina
se insinúa entre los labios
dejando en ellos un rastro
de sangre sin coagular
Al ajo somos inmunes
a las cruces y a la plata
y cuando vamos de caza
nos tenemos que alimentar
¡Cómo me gusta ese cuello!
dice alguna de nosotras
¡Y a mí me gusta otra cosa!
no nos vamos a engañar
Cuando encontramos la presa
clavamos en su corazón
del zapato el fino tacón
para poderlo inmovilizar
Con sinuosos movimientos
enseñamos los colmillos
y ya , sin previo aviso
en su cuello se van a hincar
Succionaremos su sangre
y toda su vida entera
quedará yerto en la acera
sin sangre que derramar
y nosotras vampiresas
cumpliremos la misión
de dar caza al ladrón
que un alma quiso robar
Vampixaso