Yo quisiera recriminarle al cielo
¿porqué en las noches esta angustia clama?
cuando solo, en la gris penumbra inquiero
pesadumbres que atormentan el alma.
En medio de la esquila quejumbrosa
que tañe con la lúgubre alborada,
llamando a los maitines de indulgencia
que alivien la congoja aprisionada.
!Ya Cronos! cruel verdugo de mi duelo
se niega a caminar apacentado,
los minutos devoran lentamente
entrañas del dolor vuelto pecado.
En aristas se quedan los recuerdos
el tiempo tu memoria va empolvando,
la sin razón se niega a lo evidente
de un amor que el destino va truncando.
Añorando sigo eterno milagro
que nunca podré separar del alma,
al creador pido repita, Lázaro
desde tu cenizas, !levántate y anda!
UN POETA LÍRICO
Arturo Gil
30/01/2017