Cuando el rostro negro de la muerte
visite mi frígida y oscura morada
ya estará echada mi sádica suerte;
¡Seré sueño sin alma y postura estrujada!
¡Un grito en silencio, un cadáver acurrucado,
un cuerpo frío que ya no sabrá de tibiezas,
ni de dolor, ni de suplicios ni de días hastiados!
¡Solo silencio de sepulcro y flores de malezas!
¡Cuando llegue el día de mi muerte
Seré calma desgarrada de abismos
Y veré gentes dolidas sobre mi cuerpo inerte!
¡Seré triste tumba surcada de designios!
¡El canto fúnebre mustias campanadas corearán.
Es la marcha triunfal de la muerte sobre la vida,
negra muerte como la noche que a mi cuerpo roerá!
¡Fui promesa, soy historia y seré estrella desvaída!
Nelly h
31/ 01/17
Argentina