Hemos quedado dilatados en la membrana acústica de la soledad
[Ruidos del pasado
presente y futuro
El silencio nos hiere en una palabra
adiós en la voz del olvido
susurros como hojas suicidándose en Otoño
bella imagen te oxidas en la piel
sangre de un nocturno amarrándose en dolor
cuando el cielo cae en mi voz perdiéndose en un adiós
apretado en el pecho, entre tantas sombras
que carcomen en tu frente árida
de mis besos callándose la pasión y el amor entre rejas
en prisión mi alma
mi alma entre tus manos apretadas al egoísmo de tu pecho,
he
quedado
perdido en una pérdida ajena a mis ojos maquillándose en la difusa soledad
donde vivo desgarrando la melancolía
enterrando delirios y besos entre las heridas punzantes en la sangre fría
aferrada en mi corazón que muere
reviviendo a latidos
cuando te recuerdo,
cuando sueño a muertes disecadas en mis dedos
tacto tácito que haces metáfora en mi onírico desvelo
al ver etiquetarme el alma en los versos
como un día sin ser día, un tiempo sin ser tiempo
un poema siendo génesis de un amor escrito a vacíos
permaneciendo en una voz eco del silencio
aquí, donde permanezco escuchándote a través de la muerte
y el idilio de los sueños
aquí donde muero
aquí
aquí
aquí
donde te abrazo con un beso
y con mis labios encierro tu recuerdo
en silencio
en s i l e n c i o . . .]