Julian Emanuel Rodriguez

el dilema de la comunicaciĆ³n

Cuando estoy entre esas inmundas fichas

siempre extraño a mi perro,

porque con la gente que aprecio

puedo comunicarme al instante via Whatsapp

 pero con mi perro, con el no,

la tecnología ha crecido mucho últimamente

 pero no hay o no me consta de ninguna artefacto

que te comunique con tu perro

cuando necesitas tirar una pelota lejos y que te la devuelva.

 

No hay nada que me haga sentir

que estoy con ese canino saltarin

 que mueve la cola y salta cual kanguro a  mi regreso a casa;

estoy deseando con todo mi ser

la invencion de un celular para perros

para que ellos puedan

comunicarse con nosotros cuando nos extrañan

peor aun

cuando ya estén olvidando nuestras voces.

 

Cuando queda la casa sola

mi perro no tiene forma de advertirme

que el gato intruso del vecino meo en el baño,

no tiene forma de enviarme un mensaje

para que en su soledad se sienta acompañado.

 

Siempre pero siempre entre esas fichas

mientras cebo un mate

estoy pensando en compartirle ese mate a mi perro

para que me cuente

sus recuerdos de cachorro y sus anhelos de adulto,

que me cuente mate de por medio

que sueña y a quien extraña

cuando se queda solo junto con la perra de mi abuela y mi gata.