Tenia todo lo que un hombre podía esperar
abrazos, consejos y apoyo
viajes, vacaciones, un gran trabajo
pero como saber que me faltaba algo si no lo sentía
Nunca me había enamorado
Nunca había sentido la necesidad de beber de unos ojos
hasta que al verte la sed se intensificó
solo quería saciarme en las aguas de tu ser
Siempre bebí de aguas equivocadas
todas aguas de mar, que en vez de sanar, mataban
no busco ahogarme, tampoco ahogarte
busco beber y ser bebido,
Desde que existes siempre estoy sediento
y te quiero a ti para purificar mi ser
quiero verte y que amanezcas sobre mi sed
y así saciados los dos nos mojemos en amor