Las almas calan en el delirio,
los besos amarran
el fuego incendia a la ambición
y encumbra a los placeres intensos;
los deseos realzan la noche,
las caricias adornan el privilegiado
escenario de dos cuerpos
aprisionado en un vendaval de pasión
que arrastra consigo un coro sublime de gemidos,
gestos y miradas que engrandece junto a un te Amo
a las nobles sensaciones de dos seres ceñidos
en el puro y perfecto sentimiento.