Necrofagotimes

Á tono III.- (07/02/2017).-

De repente, algo resquebraja al acostarme solo
En el espacio propiamente pequeño
Donde habito solo sulfura
Toda una tormenta de claustrofóbicos sentimientos,
Sólo míos (o compartidos, pero desde este lado solitario).
Entonces, respiro sereno e inconmovible,
Como el dolor de mi estómago.

 

Tanto despertar irrevocablemente solo,
Para hacer solo las apremiantes tareas que sólo
Son relevantes para mí. Me obliga
A masticar tranquilo toda mi rumiación
De deberes propios y ajenos.
Igual a este cocinarme solo,
En la mesa para uno donde soy
Mi propio indeseable invitado.
También al enfrentarme al desorden y la mugre
Que yo solo he regado en todas partes;
Me lleva a viajar sin moverme
Al otro lado de mi propio abrazo.

 

Pero, entre tanta soledad,
A veces ni me encuentro
(O me acuso de imposibles sólo gestados por el azar).
Apenas si puedo dormir, despertar, comer, distraerme.
Todo tiene un peso extra,
Como una inmensa ciudad vacía,
Donde mis pasos callejean su eco, apresurados.
Asustado, me sostengo en mi propio sitio,
Tocándome la nariz
Para asegurarme de que aún existo.