Vive en tu corazón de manera permanente;
tiene el defecto del orgullo,
odia verse débil,
atrapada en el laberinto que diseña el corazón.
Se rinde fácil,
vive cansada,
ni el dolor punzante, logrará detenerla para huir en el primer fracaso.
El amor se tatúa con la tinta de la razón en el corazón,
él es su piel, por eso es el único que grita con dolor cuando la razón usa palabras como armas para destruir la guerra en la que no podrá vencer.
El corazón da oportunidades, así como lo hace la vida,
la razón es lo más humano, no quiere ser semejante a la existencia por eso
intenta borrar de la memoria de este, el motor de los recuerdos para destruir el plan que la enloquece.