argantonio

Solamente una vez

Solo una vez fui al desierto,

y llovió a mares,

fue un quitapesares,

y un sinfín de pájaros trajo el viento.

 

Había un Saharahui que tenía un huerto,

y en el humilde huerto había un par de naranjos,

frutas doradas en la arena, eran milagros,

y es que en el Sahara, todo no está muerto.

 

Aquel hombre hizo un pozo,

tan profundo como pudo,

y encontró el agua ansiada.

 

!Que alegría, que gozo!

yo de los milagros dudo,

pero la fe en si mismo fue recompensada.