Hoy su máscara luce de metal
va por la muerte y deja su huella
de malignidad, pues para ella
todos las noches son carnaval.
Busca consuelo del vendaval,
a salvo de su voz, espantosa
con su apariencia más engañosa
que confunde a cualquiera al besar
¡Sí!... por parafilia se deja llevar,
sacrilegio con saña furiosa.
x.x.
Ya reinicia su asedio la loca
atacando con furia maldita
es un ser de maldad infinita
escondida detrás de la toca,
Entramando estrategia que brota
disfrazada, oculta su cara
vigilando su presa más clara
sobre los inocentes y muertos
amores que deseos van yertos.
Imposible que ella cambiara.
Amalia Lateano