En mi vida anterior fui una simple mujer
Amante de la música la poesía y el placer,
Aunque no siempre recibí, el amor que yo esperaba
Disfrutaba los momentos que la vida me regalaba.
Un día decidí, convertirme en vampira mala
Recorro cuevas y montes buscando candidatos,
Así fue que en un parque encontré un alma en pena
Que con un libro en la mano solo leía un poema.
Me contó de su historia hace cuatro siglos atrás
Solo creía en el amor, era romántica y soñadora,
Le pedí que fuera vampira y probara sangre nueva
Fue cuando me contó que también fue pecadora.
Ella no quería porque estaba muy viejita
Le dije “tiene sus ventajas eso de ser ancianita
Llevas las experiencias y recuerdos de tus pecados
Chuparás sangre joven sin hacer ninguna cita”
Dice que amó con locura, pero mal correspondida
Ella era mayor que él y ancianita la llamaba,
Aunque al unir sus cuerpos, todo lo dicho olvidaba
Le gustaba su experiencia, extasiado él quedaba.
Después que lo perdió le escribió un nuevo poema
Que nunca nadie ha leído, ella sentía pena
Que supieran que él, la elevó a las estrellas,
Ella también gozaba de sus eróticas faenas
Al fin la convencí, entendió todo el proceso
Después de la ceremonia, la anciana se transformó
Dijo “ Le podré leer mi poema y lo que quiero hacer yo”
Cambio la página del libro y esto fue que leyó.
QUIERO…
Hacerte el amor
De mil maneras diferente,
Dibujar con mis ansias
La desnudez de tu piel.
Besar tu cuello, acariciar tu espalda,
Bajar a tu centro una y otra vez.
Amarte sin timidez ni pudor alguno,
Hacer de tu sexo un gran derroche,
Cabalgar en lo que te hace viril
Ser tu amazona toda una noche.
Sentir tu ardiente presión en mí
Hasta que tus fuerzas se extingan,
Acariciar tu cuerpo ferozmente
Pedirte que me des… lo mejor de ti.
Aquietar con mis ganas tu erotismo
Recorrer tu piel lentamente,
Besar tus labios, morder tu pecho,
Beber el licor que brota de tu fuente.
Y si me cambias por otra
Porque ya estoy mayorcita,
Nunca podrás olvidar
A esta erótica ancianita.
Vampisela