Siento deseos de escribir
nuevamente a mi amorcito,
porque es mi amor bonito
que me hace revivir.
Cuando veo su sonrisa;
o escucho su voz melosa
tan suave, tan melodiosa,
que a mí me llega sin prisa.
Su mirada que es divina,
soñadora y prodigiosa
es pícara y misteriosa
como una brizna muy fina
que me acaricia la piel,
cuando entorna sus ojitos,
dándome muchos besitos
tan dulces como la miel.
Que a mí me hacen vibrar,
con alegría y amor;
para mí es lo mejor
que me ha podido pasar.
Por eso cuando lo beso
yo me siento tan feliz,
porque por él aprendí
que el amor es embeleso.
Vero