Como no extrañarte...si alegrabas mis días...mis horas...mis noches
Extraño tus besos que eran como...un poema salido del alma
Tus brazos fuertes que abrigaban hasta mi espíritu
Tú pecho que era la almohada perfecta para mi cabeza
Tus palabras que me alentaban
Tú risa un aire fresco en los momentos infernales
Contigo podía...pensar y hablar, llorar y reír, cantar y bailar
todo al mismo tiempo
Tú me sujetabas y yo me agarraba fuertemente de tí
Aunque no te necesitara...elegía estar contigo
porque nos amábamos sin dependencias
ni cárceles emocionales
Éramos novios, amantes, esposos
pero ante todo...compañeros de vida
y nos amábamos a la antigua...desde las entrañas
y el deseo de nuestros cuerpos
no se acababa...se acumulaba.