Oh recuerdo de mi infancia,
Mis mejores momentos,
Ella, solo ella.
Su historia me hace llorar…
Oh mi primer beso;
Mi primer verso.
Ella es mi motivo de ser poeta.
¿Por qué?
Porqué en ella vi la poesía.
Xóchitl…
Era su nombre,
Que hasta la fecha;
Aún grito al cielo.
La princesa de las flores,
La princesa de mi vida…
Y que le debo de admirar.
Sin conocerla me enamoré de ella,
Hermosa como el paraíso…
Tan culta en su belleza.
Y así era mi vida,
Yo de lo más bajo…
Ella en la cúspide de su vida…
Adolescencia vívida,
Una mujer en cuerpo de niña.
Así era ella…
Tan llena de felicidad,
Tan como yo.
Sufriendo por dentro,
Siempre con una sonrisa en los labios…
Mi princesa de las flores.
Si ya lo tienes todo…
Me dices al oído que me quieres,
Y me dejas al olvido.
Dichoso fui…
Por haberte querido;
Pues fuiste mi primer libro de versos.
Pues fuiste como una doncella,
Que rechazaba mis besos;
Y aquí estoy mujer.
Hecho un adulto…
Recordándote,
Admirándote…
Como cuando era un niño.