I
pierdo la cabeza que me fue dada
pierde la cabeza que le fue dada
comenzamos a encontrarnos
súbitamente en el otro;
a comportarse súbitamente esposo
caballero y psicólogo acartonado;
a comportarme amante descerebrada
y violentada en el éxtasis de sus ojos de miel
en la cálida suavidad de su piel de ébano
El chorlito pregunta
qué artificio nos obliga a perder el mapa
la aguja y el rumbo
sino la promesa de un amor de mentira
y la conquista del cazador
Hubo tiempo de conocerse
pregunto a la incertidumbre
Compartieron alimento
pacíficamente
se preguntaron si realmente deseaban
comenzar por la cópula
o siguieron la costumbre manida
de entrar uno en otro
sin sentir nada
con un hambre inverosímil
siendo dueños de lo que no puede poseerse
II
Para que se demuestre la violencia a la mujer
debe haber sangre, sudor y lágrimas
la misma ley se aplica al hombre;
leyes mentirosas
que todo lo extreman
a la vida
o la muerte...
III
Le encuentro en el territorio
del más allá
que para mí
es el más acá
soy muy feliz
contemplándole
es gracioso y menudo
calidez nueva de un hombre
desconocida
o olvidada
mi corazón late
a pesar de mí
te ama
fue a tu lado
entre contrariedades
y grandes tensiones
el giro de la oscuridad
a la luz
(cuanto más te niego
más te amo
preciosa criatura,
ave morena
de ágiles saltos,
(no debo preguntar a nadie
ni siquiera al destino
qué siento por ti)
Esta es la verdad
de quien sigue su mapa:
ya estuve en tu pecho
y sentí la tierna dulzura de tu mano