Max Hernandez

Vampimax el sabio... SVP

Después de aquel terrible encuentro con las hadas y el banquete sangriento
Vampimax se dedicó de lleno, a leer enciclopedias y libros completos.
Se dedicó a componer muchos versos, y tambien historias fábulas y cuentos
Pero sobre todo gustaba el murciélago, cuando a él otros venian por sabio consejo.

 

\"Vampimax, cómo me corto el pelo?\" \"Vampimax, que hago para bajar de peso?\"
\"Vampimax, me escribes un poema?\" \"Vampimax, dime como puedo solucionar esto?\"
Y así de a pocos el murciélago, se creyó ser un gran y sabio consejero.
\"Para ser vampiro hay  que ser sabio\" se decia, y regalaba muchos y variados consejos.

 

Hasta que llegó aquel memorable día, en que a él vinieron vecinos y amigos.
\"Hay un problema -le decían- sobre como distribuir los frutos del árbol de higos\"
El mencionado gran aŕbol estaba, plantado entre su caverna y la de los vecinos
Y por eso todos los murciélagos disputaban, por los mas jugosos y sabrosos frutos escogidos.

 

Sentado en silencio Vampimax meditaba, \"Menudo lío en el que me he metido\"
Hasta que de a pocos una historia recordaba, de un gran rey que había existido,
Sabio entre sabios había sido, y de un problema similar con elegancia había salido
Así que, con solemnidad y elocuencia dijo: \"Partamos por la mitad la planta de higos!\"

 

A voz en cuello hurras vitorearon, y felices se abrazaron y aplaudieron.
\"Eres Vampimax un sabio, eres un genio\", muy contentos todos aclamaron.
Lo cargaron en andas y al estrado lo llevaron, para que disfrute del genial festejo,
Y entre todos la higuera cortaron, usando hachas y sierras, y hasta badilejos.

 

Partida en dos cayó la higuera, las ramas y los higos cayeron al suelo,
Estaban furiosos los murciélagos con esto, pues el suelo estaba lleno de excremento.
Salió disparado Vampimax en rápida huída, mientras los murciélagos lo perseguian.
\"Es tu culpa, tú nos aconsejaste esto -le decían- Pagarás caro por tus malos consejos\"

 

Como pudo llego a su minicueva corriendo, y se atrincheró en su almacen de invierno
Es ahí donde guardaba los alimentos, que recogía en todos los tiempos buenos.
Puso candados, trancas y cadenas, cerró todo con llave por dentro.
\"No saldré de aquí mientras viva -se decía- O hasta que se calmen los furiosos murciélagos\".

 

Así pasaron muchos largos días, semanas y hasta meses se sucedieron
Vampimax de su cueva no salía, pero ya se estaban acabando los alimentos.
\"Amigo sal de tu cueva y no temas -alegres le decían sus amigos contentos-
Ya no estamos contigo molestos, además deberías de ver en persona esto\"

 

\"Saldré\" Dijo Vampimax con valentía, pero lo cierto es que estaba hambriento
Hace buen tiempo se había acabado la comida, y a punto estaba de comer excremento.
Al salir de la cueva vio con alegría, que en el lugar donde estaba el viejo árbol de higos
Muchos jóvenes verdes arbustos crecían, Y ya algunos tenían deliciosos frutos regios.

 

\"Soy un escogido\" Se decía Vampimax para sus adentros mientras sonreía,
\"Estaba escrito, seré vampiro, no cabe duda que soy sabio y casi un genio,
Y no está lejos aquel maravilloso día, en que este vampiro genial alce vuelo
El conde Maximum Vampyrus ha vuelto, y dentro de poco saldrá a cazar cuellos...\"