Quiero uno de estos días encontrarte
en la caída del sol;
en mi alcoba cuando llegue de mi trabajo,
y adorne la mesa donde cenaremos el plato
de tu agrado yo complaciéndote;
para que te quede y disfrutar de gran amor,
que los tenemos aunque sea por un rato
y después te marches;
y vuelvas como los buenos amantes
que se aman ser feliz sin mirar a nadie.