Llamaste a mis brazos
en busca de compañía;
tomaste mi mano
sin darme cuenta yo cedía,
acercaste tus labios,
los míos respondían.
Al terminar el día
tu boca acababa en la mía.
Me besaste,
aún cuando yo dormía,
despertaste a un ser,
que ni yo conocía;
transformaste mis noches,
aún cuando eran día;
dormir a tu lado
era lo que yo más quería.
Fuiste un momento,
una bella pasantía,
fuiste y serás lo que tuve,
pero no me correspondía.