Quiero partir, quiero estar bien,
sin nadie más a quien besar.
Me quiero ir, ¡quiero escapar!;
no aguanto más mi realidad.
No más dolor, ni soledad,
quiero encontrar mi libertad.
Me podrás ver sobrevivir,
con drogas no quiero morir.
Quiero escapar, a algún lugar,
donde asumir mi identidad.
¡Quiero volar, quiero ayudar
a esos niños que nacerán!.
Voy a viajar al más allá,
donde no me encontrarás.
Voy a beber de mis penas,
voy a decir la verdad:
no te pude olvidar.
*Para vos Sebita, que viajaste a todos los círculos infernales del Dante y regresaste para contarnos tus historias de amor, locura y de muerte.