Eres divina, bella e insigne,
Brisa de otoño, luz de mis tardes,
Luna radiante, lucero añil
De auroras de mayo,
Te veo y desmayo dulce gacela,
Y por las noches fiel me desvela
Tu imagen fresca, lluvia de verano.
Por donde mire hallo belleza,
Veo en tus ojos tu alma bella,
Sobre tus labios roja cereza
Que tienta a besos el degustarla,
Hacer muy míos esos contornos
Y hacerlos diario mi carretera.
Que más pudiera decir de vos?
Incompetente mi diccionario!
Sólo te digo que no hay horario
Donde tu imagen ausente esté,
De tal manera te amo incesante,
Se hace tenerte tan necesario
Que voy sediento hasta tu fuente
Para berberte como se bebe
El fresco elixir depositario
De amor eterno, dulce y ferviente.
Te dejo un beso, tinta indeleble
De amor sincero que nunca muere.
(Vozdetrueno)
Pensamientos de amor en una servilleta, una parada en el camino, y un te amo... Eterno.