Soy una ave surcando en azul cielo,
Contemplando en silencio fugaz vida,
Sombra que se nos pierde y se nos olvida
Que es un campo de amor, mas no de duelo;
Observo como dejan todo anhelo,
Lo tornan ambición, lucha homicida,
Sólo vanos afanes sin medida
Que convierten el sueño en gran desvelo;
Y vuelvo a mi montaña, en las alturas,
Donde busco la paz, enviar mensajes,
Breves rimas que yo llamo locuras,
Donde, como aire, surco otros paisajes,
Hallo nítida luz de almas tan puras
Que se convierte en mil dulces brebajes…