Con movimiento sin vida
masiva corriente de acciones
suicidas esclavas del sol
del fulgor de las llamas
mi cuerpo reclama la sombra
que forma tú prisma el cielo
exclama la cercana llovizna
y la sombra del mismo opaca
la claridad de la ciudad
en cinismo.
Hoy tu presencia como sombra
en la almohada la cubre tu
ausencia, cubre el cristal
tal desgarre de nubes el calor
de tu amor es ausente el frío diligente y latente, el valor no lo tuve ni tengo para ir tras tú sombra en dolor se te nombra a menudo en el diálogo mudo sin verbo.
Sin verte te nombro y formó tú rostro en mi mente tenerte
quisiera pero más que a tu
sombra más que a tu nada
mas que a tu adios...