emiliodom

LA LLUVIA

  Sobre mi cara cansada, caen gotas de lluvia, ellas se muestran desnudas, puras, llegando a humedecerme el alma. ¡La lluvia en su caer incesante, moja el amor, pero el fuego de tus besos, permanece vivo!! Aquel determinado día, apareciste desnudando tu alma con lentitud, compartimos nuestra unión, con pasión y entrega sin recato alguno y mucha dulzura... Al llegar la mañana, comprendí que te habías instalado en mi, con entereza. Soy consciente que al partir, dejaste olvidado un suspiro, siendo éste un signo de identidad, que me confirmó tu visita. Mientras espero tu regreso, procuraré dormir al amparo de la noche para despertar con el nuevo sol del amanecer